
Pepe, paciente de St. Jude, con su abuelita
Independientemente de la duración o el costo del tratamiento médico, las familias nunca reciben una factura de St. Jude por tratamiento, transporte, hospedaje ni alimentación – porque su única preocupación debe ser ayudar a sus hijos a vivir.

Área recreativa y de juegos de St. Jude en Memphis, Tennessee.
Y estamos trabajando para ayudar a niños en todo el mundo.
Los tratamientos descubiertos y desarrollados en St. Jude han ayudado a incrementar la tasa de supervivencia del cáncer infantil de un 20 por ciento, cuando el hospital abrió sus puertas en 1962, a un 80 por ciento en la actualidad.
Sin embargo, en muchos países en desarrollo, menos de uno de cada cinco niños con cáncer sobrevive. St. Jude está trabajando para cambiar esta estadística.
Para el 2030, nuestra meta global es curar al menos 60% de los niños con los seis tipos de cánceres más comunes en el mundo.
Los descubrimientos desarrollados en St. Jude son compartidos libremente.
Cada niño salvado en St. Jude significa que médicos y científicos pueden utilizar ese conocimiento para salvar a miles de niños más en todo el mundo.

Arte del Planeta Tierra creado por Clayton, paciente de St. Jude.

Aspen, paciente de St. Jude, sonriendo mientras está en el hospital
Juntos, podemos construir un futuro más brillante.
Únase a la familia de St. Jude y apoye nuestra misión de salvar vidas, ya sea creando una recaudación de fondos, siendo un donante mensual o enviando una tarjeta digital a nuestros pacientes, entre otros.