Mi hijo Josiah, ha superado el cáncer y otros desafíos
A veces, el niño que luce distinto a simple vista es quien tiene la mayor fuerza interior.

3 de junio de 2025 • 2 mínimo
Español | English
Cuando pienso en mi hijo Josiah, no puedo evitar sonreír. Tiene una imaginación que no conoce límites. Ya sea que esté construyendo algo con sus preciados bloques de Lego, o soñando con nuevos inventos, siempre está creando. Josiah es un niño único, y ha sido así desde el principio.
Josiah nació con una afección llamada neurofibromatosis, que lo predispone al crecimiento de tumores. Era solo un niño pequeño cuando le diagnosticaron un tipo de cáncer llamado rabdomiosarcoma embrionario, después de ser referido a St. Jude Children's Research Hospital®.
Él ni siquiera sabía que estaba enfermo. Su fuerza de voluntad para seguir esforzándose, para seguir siendo él mismo, siempre ha sido increíble.
Hay momentos en los que me emociono pensando en lo mucho que ha superado. Tenemos un video suyo tomado en un pasillo de St. Jude cuando era pequeño, y me hace llorar porque, aunque estaba enfermo, tenía mucho estilo al caminar.
Incluso ahora, a los 9 años, Josiah sigue recibiendo tratamiento en St. Jude por un neurofibroma plexiforme en la mejilla.
Este crecimiento no es canceroso, pero ha afectado su apariencia. Los niños en la escuela a veces no entienden por lo que ha pasado. No tienen la intención de ser crueles, pero su curiosidad a veces puede ser difícil para Josiah. Siempre le digo que les explique su condición porque le encanta hacer amigos.
Josiah me ha enseñado algo importante que vale la pena compartir: a veces, el niño que luce distinto a simple vista es quien tiene la mayor fuerza interior.
Josiah ha sido un guerrero desde el primer día.
Cruzar las puertas de St. Jude por primera vez cambió todo para mí. Entendí al instante por qué esos comerciales de St. Jude salen en la televisión. Estoy agradecido por esos comerciales porque ayudan a la gente a entender por lo que estamos pasando.
Participamos en el St. Jude Walk como familia, porque une a nuestra comunidad y hace que Josiah y sus tres hermanos se sientan fuertes.
St. Jude es una bendición. Sin su apoyo y sin nuestra comunidad, no sé adónde estaríamos.
Gracias por tomarse el tiempo de leer nuestra historia. Les deseo lo mejor a todos los papás, especialmente a aquellos que están luchando junto a sus pequeños guerreros. Mantengan la fe y permanezcan fuertes.
