Kaitlyn, es muy amigable y divertida, y hace que sea un placer estar cerca de ella.
Cuando tenía poco más de un año de edad su mamá le notó que algo le crecía y que terminó siendo un rhabdomyosarcoma, un cáncer de tejido suave.

Kaitlyn fue referida a St. Jude en el 2017, e inmediatamente estaban en camino a Memphis, Tennessee (ciudad en donde está localizado St. Jude).
Familias como la de Kaitlyn nunca recibirán una factura de pago de parte de St. Jude.

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Kaitlyn completó su tratamiento en enero de 2018, y pudo regresar a casa.
Pero meses después, un chequeo en St. Jude encontró cáncer en un nodo linfático.
Kaitlyn fue sometida a tratamiento adicional que incluyó quimioterapia y terapia de protones. “Hoy día, Kaitlyn se encuentra libre de cáncer y es eso genial”, dijo su mamá.
A pesar de todo lo que ha tenido que atravesar, la sonrisa de Kaitlyn sigue brillando.
Lo que sea que ella quiera ser en la vida, solo espero que sea feliz y que no sufra.
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