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RET5: Tratamiento para pacientes con cáncer ocular: retinoblastoma

¿Por qué se realizó este estudio?

El retinoblastoma es un cáncer infantil que afecta la retina del ojo. Nuestro objetivo es curar el cáncer, salvar la vida del niño/a y preservar la vista tanto como sea posible. Se necesitan nuevos fármacos (medicamentos) para quimioterapia para niños con esta enfermedad. Un fármaco llamado topotecán dio buenos resultados en niños con tumores en el cerebro, el sistema nervioso central, los nervios y los músculos. Estudios iniciales mostraron que también podría funcionar contra el retinoblastoma.

Los pacientes muy jóvenes corren riesgo de pérdida de audición si reciben una quimioterapia llamada carboplatino, pero el riesgo es menor si los niños tienen más de 6 meses de edad en el momento de recibir la primer dosis. Otra quimioterapia, el etopósido, se ha relacionado con algunos casos de leucemia secundaria. Queríamos averiguar si podíamos retrasar la administración de carboplatino y eliminar el etopósido y, a la vez, mantener altas las tasas de supervivencia.

Los demás objetivos de este estudio fueron los siguientes:

  • Averiguar cuántos niños responderían a los tratamientos individualizados.
  • Aprender cómo responden los tumores de los niños con enfermedad en ambos ojos al topotecán y la vincristina, con un tipo de factor de crecimiento que ayuda a las células sanguíneas a recuperarse tras la quimioterapia.
  • Saber más sobre el desarrollo intelectual, social y emocional de los pacientes.
  • Averiguar si una parte del cerebro llamada glándula pineal cambia de tamaño después de la quimioterapia.
  • Obtener más información sobre la genética de los tumores de retinoblastoma.

¿Cuándo se realizó este estudio?

El estudio abrió en abril de 2005 y cerró en noviembre de 2010.

¿En qué consistió el estudio?

El tratamiento depende de si el tumor afecta a un ojo o a los dos, de lo avanzado que esté el tumor dentro del ojo (“incipiente” o “avanzado”) y de si el tumor se ha extendido fuera del ojo.

El estudio se dividió en tres grupos:

  • Grupo A: Los pacientes con enfermedad incipiente (no tan avanzada) o aquellos con enfermedad en ambos ojos a los que se les extirpó un ojo y el ojo restante tenía enfermedad incipiente recibieron ocho ciclos de vincristina y carboplatino. También recibieron terapias focales para reducir y eliminar el/los tumores. Las terapias focales incluyen lo siguiente:
    • terapia láser,
    • congelación (crioterapia),
    • administración local de radiación (“braquiterapia”), o
    • tratamientos térmicos que se dirigen a los tumores mientras el niño está dormido (bajo sedación).
  • Grupo B: Los pacientes con enfermedad avanzada en ambos ojos iniciaron la terapia con dos ciclos de vincristina y topotecán. Los que obtuvieron una buena respuesta continuaron con 9 ciclos más de quimioterapia con vincristina, topotecán y carboplatino. Se evitó la radiación en el ojo y el tejido que lo rodea a menos que fuera necesaria para salvar la visión del niño.
  • Grupo C: A los pacientes con enfermedad avanzada en un ojo se les extirpó ese ojo en el momento del diagnóstico. Luego, se les trató en base a los factores de riesgo cuando se examinó el ojo bajo el microscopio (“factores de riesgo patológicos”):
  • Los que no presentaban indicios de que el tumor estuviera invadiendo las capas del ojo o fuera de ellas eran de bajo riesgo y no recibían más tratamiento.
  • Los niños con tumores que empezaban a invadir las capas del ojo se consideraban de riesgo intermedio o alto, según la profundidad de la invasión.
    • Los pacientes con riesgo intermedio recibían cuatro ciclos de vincristina, ciclofosfamida y doxorrubicina. Luego se les administraba un tipo de factor de crecimiento que ayuda a las células sanguíneas a recuperarse tras la quimioterapia.
    • A los pacientes con enfermedad de alto riesgo se les administraba quimioterapia con vincristina, carboplatino y etopósido alternados con vincristina, ciclofosfamida y doxorrubicina durante un total de 6 ciclos. Se administraba radiación si el tumor invadía los tejidos que rodean el ojo o llegaba hasta el extremo del nervio unido al ojo (nervio óptico).

¿Qué aprendimos a partir de este estudio?

  • El número y el tamaño de los tumores disminuyeron en los pacientes del grupo B tras 2 ciclos de vincristina y topotecán. El éxito del tratamiento fue mejor en los tumores grandes, en tumores más cercanos al nervio óptico (no en los bordes o la periferia del ojo) y en los pacientes mayores de 4 meses de edad al momento del diagnóstico.
  • Los pacientes toleraron bien la quimioterapia, pero tuvieron que recibir transfusiones de sangre y plaquetas. Se trata de un efecto secundario previsto, pero los pacientes y los médicos deben estar conscientes de esta necesidad.
  • Los pacientes con enfermedad avanzada en 1 ojo que no se había extendido y a los que se les extirpó ese ojo en el momento del diagnóstico podrían curarse con un tratamiento de intensidad graduada basado en la patología.
  • El topotecán combinado con vincristina, carboplatino y terapias focales agresivas funciona bien en niños con retinoblastoma avanzado. Los tratamientos salvan sus ojos y su visión. Más del 75 % de los pacientes de este grupo tenían visión en, al menos, un ojo de 20/40 o mejor, lo que es suficiente para obtener una licencia para conducir.
  • Hemos hallado las mejores dosis iniciales de topotecán para distintos grupos de edad en basado en cómo el organismo utiliza y metaboliza el fármaco, y no solo del peso del paciente.

¿Cuáles son los siguientes pasos en la investigación como resultado de este estudio?

Este fue un estudio realizado en una sola institución, por lo que deberían tratarse más pacientes con estos fármacos para conocer el éxito a largo plazo de este tratamiento en niños con enfermedad avanzada.

El uso satisfactorio de topotecán en la enfermedad avanzada puede ser útil en la enfermedad incipiente, que pudiera estar presente en los pacientes más jóvenes. Esto permitiría que el niño estuviera mayor al momento de tratarse con carboplatino y esto podría reducir el riesgo de pérdida de audición.

El topotecán reduce los tumores en las células de la retina, pero algunos tumores se rompen dentro del ojo (siembras vítreas). Estas siembras son bastante resistentes a la quimioterapia estándar. La quimioterapia administrada directamente en el ojo o que es dirigida a destruir las células tumorales y no la retina normal puede ser necesaria para salvar más ojos.

El desprendimiento de retina se resolvió en el 36 % de los ojos tras solo 2 ciclos de tratamiento en pacientes con enfermedad avanzada. Es importante estudiarlo detenidamente en futuros pacientes para ver si esto aplicaría a un mayor número de pacientes.

¿Cómo afecta este estudio a mi hijo?

Todo sobreviviente de cáncer infantil debe recibir atención médica de seguimiento a largo plazo. A través de la clínica de St. Jude After Completion of Care, su hijo recibirá información y guía para la atención después del tratamiento. Converse con su médico de St. Jude sobre pautas específicas que aplican a su hijo.

Para obtener más información

Converse con el médico de St. Jude de su hijo sobre las preguntas o inquietudes que tenga como resultado de este estudio.

Publicaciones generadas a partir de este estudio:

Chemoreduction with Topotecan and Vincristine: Quantifying Tumor Response in Bilateral Retinoblastoma Patients. King BA, Sahr N, Sykes A, Wilson MW, Brennan RC. Pediatr Blood Cancer. 2021 abr;68(4):e28882.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/33507604/

Pathologic Risk-based Adjuvant Chemotherapy for Unilateral Retinoblastoma Following Enucleation. Sullivan EM, Wilson MW, Billups CA, Wu J, Merchant TE, Brennan RC, Haik BG, Shulkin B, Free TM, Given V, Rodriguez-Galindo C, Qaddoumi I. J Pediatr Hematol Oncol. 2014 ago;36(6):e335-40.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/24577551/

Topotecan and Vincristine Combination Is Effective Against Advanced Bilateral Intraocular Retinoblastoma and Has Manageable Toxicity. Qaddoumi I, Billups CA, Tagen M, Stewart CF, Wu J, Helton K, McCarville MB, Merchant TE, Brennan R, Free TM, Given V, Haik BG, Rodriguez-Galindo C, Wilson MW. Cancer. 2012 nov 15;118(22):5663-70.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/22516936/

Ocular Salvage and Vision Preservation Using a Topotecan-Based Regimen for Advanced Intraocular Retinoblastoma. Brennan RC, Qaddoumi I, Mao S, Wu J, Billups CA, Stewart CF, Hoehn ME, Rodriguez-Galindo C, Wilson MW. J Clin Oncol. 2017 ene;35(1):72-77.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/28034080/


La información precedente tiene como objetivo brindar solo una descripción básica sobre un protocolo de investigación que puede estar actualmente activo en St. Jude. Es posible que los detalles disponibles aquí no sean la información más actualizada sobre los protocolos que usa St. Jude. Para recibir los detalles completos sobre un protocolo y su estado o uso en St. Jude, un médico debe ponerse en contacto directamente con St. Jude.

Descripción general

Título completo:

Estudio de tratamiento para pacientes con cáncer ocular: retinoblastoma (RET5)

Meta de estudio:

Estimar la supervivencia ocular y la supervivencia sin complicaciones de pacientes con enfermedad bilateral de retinoblastoma intraocular avanzado en cualquiera de los ojos (R-E IV-V) que responden al intervalo de vincristina/topotecán, con ciclos alternos de vincristina y carboplatino con vincristina, topotecán y carboplatino periocular, con tratamientos focales intensivos.

Diagnóstico:

Retinoblastoma

Categorías de ensayos clínicos:

Tumores sólidos Cáncer infantil Retinoblastoma

Para médicos e investigadores

Los pacientes aceptados en St. Jude deben ser derivados por un médico u otro profesional médico calificado. Obtenga información sobre cómo St. Jude puede asociarse con usted para atender a su paciente.

 

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